No esperes de mí
una mansalva de perdigones
No pretendas de mí
una mansalva de perdigones
No pretendas de mí
un silencio de tornado
No sentencies de mí
esta manía de abrir las casas
No sentencies de mí
esta manía de abrir las casas
y ver que hay dentro
No pienses de mí
lo que el agua daña
No persigas en mí baldíos
como sinómimo de las espaldas
como sinómimo de las espaldas
No me malgastes...
ResponderEliminar“somos páginas que el viento hojea…”
dejo mi testimonio y no olvides que crucé por aquí.