lunes, 7 de abril de 2014

A los siete, de cada tarde

Mi hija es el espejo del sol
naciendo desde mis brazos

Me puedo ver a mi misma
a los siete
rodando al mundo a cada giro
para volverlo a querer
aunque no pare.

mi hija es la niña que se sienta
en mis pestañas

Me puedo hamacar en mi mirada
a los siete
de cada tarde.

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