lunes, 14 de enero de 2013

Sin Cercas

La música de una llave
me abre el ojo
ahora me brota un océano
en cada una de  mis mejillas

Doy a la fe
mis virgencitas,
una morena
como la que custodia a mi niña
en las noches de los escenarios

Doy al hambre
una multitud de desventajas
sobre una mesa sin límites
pero con pocas sillas

Doy al amor
mi amor,
este corazón que me excede

3 comentarios:

  1. Te leo, loca dos. Te leo.

    Y me gustó tu poema, con su verso final: Este corazón que me excede.

    Besos.

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  2. ... en una mesa sin límites/ pero con pocas sillas... Adecuada visión de la existencia. Gracias, poeta!

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